El graffiti parece algo actual , pero no lo es . La tecnica del graffiti se usa ya desde hace mucho tiempo
Un poco de historia
Ya en la antigua Grecia se encontraron restos de arcilla con textos grabados y eslóganes políticos. En la época de la Segunda Guerra Mundial, los nazis empleaban las pintadas para propaga su mensaje de terror y enfermizo odio hacia los judios y disidentes. El graffiti también resultó útil para movimientos de resistencia y consiguieron hacer pública su oposición.
En los 60 y 70 existieron también grupos estudiantiles en Francia que recurrieron a pósters, pancartas, creados con la técnica de las plantillas, en las que expresaban libremente sus opiniones, con míticos eslóganes como “Prohibido prohibir”, o “La imaginación al poder”.
A finales de los sesenta los adolescentes en la ciudad de Nueva York empezaron a escribir sus pseudónimos en las paredes de sus barrios, creándose una identidad propia en la calle. Escribían para sus amigos o incluso para sus enemigos, el ejemplo más significativo y a la vez el más conocido por todos sea el de Taki 183 viajaba constantemente en el metro de un lado a otro de la ciudad. En el trayecto estampaba su tag (firma) en todos los lados, dentro y fuera del vagón. El no lo consideraba como algo malo, estos actos le convirtieron en un héroe y poco después cientos de jóvenes empezaron a imitarle,Los escritores de aquella época, en principio no buscaban estilo, sólo querían aparecer por todos los lados. A partir de aquí surgió el boom y cientos de adolescentes comenzaron a poner su nombre por toda la ciudad haciéndose necesaria la creación de un estilo, tanto en la caligrafía, como en los métodos de ejecución o incluso los lugares utilizados para dicho fin. Por ejemplo, Soul 1, un escritor de la zona de Manhattan, se dedicó a escribir su nombre a media altura en los laterales de los edificios.
El graffiti en España surgió, en los años ochenta sobre todo en la ciudad de Madrid, comenzó a abrirse paso entre muchos jóvenes de la ciudad, y se estampaban en las calles, los metros y las estaciones.
Usando rotuladores en un principio y después popularizándose mediante el aerosol, el graffiti en España adquirió presencia y relevancia con los escritores de la ciudad, creando un estilo particular, diferente al que se daba en Estados Unidos y en el resto de Europa.

Muelle, (Juan Carlos Argüello) fue unos de los pioneros del movimiento en España y referente de la época; su nombre (muelle) apareció por diferentes zonas de la ciudad, fue imitado por otros muchos graffiteros aparecidos por el resto de España, que se consolidaron como estandarte e íconos respetados dentro del movimiento., por ejemplo dos de ellos son Glub y Bleck (La Rata).
A la primera movida de escritores se le denominó graffiti autóctono madrileño, así como Flecheros, por la regular aparición de flechas dentro de sus obras.

Usando rotuladores en un principio y después popularizándose mediante el aerosol, el graffiti en España adquirió presencia y relevancia con los escritores de la ciudad, creando un estilo particular, diferente al que se daba en Estados Unidos y en el resto de Europa.

Muelle, (Juan Carlos Argüello) fue unos de los pioneros del movimiento en España y referente de la época; su nombre (muelle) apareció por diferentes zonas de la ciudad, fue imitado por otros muchos graffiteros aparecidos por el resto de España, que se consolidaron como estandarte e íconos respetados dentro del movimiento., por ejemplo dos de ellos son Glub y Bleck (La Rata).
A la primera movida de escritores se le denominó graffiti autóctono madrileño, así como Flecheros, por la regular aparición de flechas dentro de sus obras.